Para conseguir buenos resultados en cuanto a
hipertrofia muscular se refiere, partimos de la base que los tres aspectos más
importantes son: la nutrición, el descanso y el entrenamiento.
En el entrenamiento, los aspectos que determinan la
hipertrofia son la tensión a la que se somete al músculo, el daño muscular y el
estrés metabólico.
La tensión mecánica es probablemente el factor
más importante a la hora de la hipertrofia muscular. El grado de esta depende
de dos aspectos fundamentales, la intensidad, que son los kilogramos de
carga que utilicemos en cada uno de los ejercicios, y la duración de la
tensión muscular, el tiempo que dura la aplicación de la carga.
Todos sabemos que el entrenamiento con cargas produce
un daño muscular, en la zona que
hayamos trabajado. Uno de los principios básicos del entrenamiento es el
principio de la supercompensación. En este caso se entiende que después de la
recuperación de ese daño muscular de las fibras, están tendrán una mayor
volumen si se ha realizado una nutrición y descanso adecuado. Debemos dejar que
la recuperación alcance su cima más alta, para tener una recuperación completa.
Si no se produce el suficiente daño muscular en las
fibras musculares, difícilmente se podrá ver aumentada la sección transversal
de las fibras, es decir, será muy difícil aumentar el volumen muscular. En la
parte excéntrica de los movimientos es cuando se produce un mayor daño
muscular.
El estrés metabólico provocado por el ejercicio
puede actuar como un potente estímulo de hipertrofia. El estrés metabólico
surge de la realización del ejercicio con cargas que se basa predominantemente
en la glucólisis anaeróbica para la producción de adenosin trifosfato (ATP), la
energía que utilizamos en el entrenamiento.
La glucólisis anaeróbica es el proceso metabólico
mediante el cual se obtiene energía para realizar las contracciones
musculares a partir de moléculas de glucosa, principalmente en ausencia de
oxigeno, ya que la rapidez con la que necesitamos esa energía es mayor que la
velocidad a la cual podríamos oxidar la glucosa con el oxigeno, de manera que
es un proceso predominantemente anaeróbico.
La glucolisis anaeróbica, da lugar a una acumulación
intramuscular de productos de desecho, conocidos bajo el nombre de metabolitos
de desecho. En concreto y más importante para este aspecto el lactato.
No hace falta que entendamos todo el proceso fisiológico,
pero si que para que se de la hipertrofia debe existir una tensión muscular
adecuada que se consigue trabajando en torno a las 8-10 repeticiones,
siendo 8 el número más adecuado de repeticiones a realizar. Pero cuando
hablamos de trabajar al 8 RM, quiere decir que llegaré a esas 8 repeticiones
bastante agotado muscularmente, no siendo posible hacer alguna más.
También debe existir un daño muscular lo
suficientemente significativo como para que estimule el crecimiento muscular,
esto viene determinado también por las cargas y el tiempo bajo tensión
mecánica. Debemos tratar de ir incrementando progresivamente la carga en todos
y cada uno de los ejercicios que realizamos. También es aconsejable medir los
tiempos de trabajo, tanto excéntrico como concéntrico, donde tardemos al menos
dos segundos en cada fase.
Por último, para producir estrés metabólico,
debemos de tratar de hacer descansos cortos entre series. De ahí que se suelan
usar descansos de un minuto o poco más.
Ruego que aquellos que no estén acostumbrados a términos de fisiología me disculpen, pero he tratado de explicarlo de la manera más sencilla que he podido.
Muchas gracias
buen articulo.
ResponderEliminarMuy buen artículo. Gracias (:
ResponderEliminarmuy bueno !!
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