PROGRESIÓN PARA HACER DOMINADAS

¿Cuántos de nosotros no tratamos de hacer dominadas y apenas nos levantamos del suelo?

Y es que las dominadas son un ejercicio tan complejo y difícil como importante para trabajar bien, no solo nuestra espalda, sino, además, otras partes del cuerpo, como por ejemplo los brazos, en los que trabajamos los bíceps y en menor medida el deltoides. 

En las dominadas lo que tenemos que conseguir es elevar nuestro cuerpo en su totalidad ayudados únicamente de los músculos de la espalda, y en menor medida de los del brazo. Existen diferentes variantes como las dominadas con agarre abierto que incidirán más en el dorsal ancho, y las de agarre cerrado que incidirán en la parte central de la espalda.

Si eres de los que apenas puede hacer unas dominadas, te aconsejo que te lo tomes con calma y sigas estos consejos.

-         Realiza las dominadas en la máquina asistida. En esta máquina podrás hacer dominadas con mayor facilidad ya que te ayuda a levantarte. En esta máquina entre más peso le pones más fácil resulta hacer las dominadas. Por lo que empieza con un peso algo inferior al tuyo y poco a poco vete bajando ese peso.

-     Utiliza bandas elásticas resistentes que te puedan ayudar a la correcta realización del ejercicio. Empieza apoyando ambos pies en la banda elástica y cuando te veas mejor, solo apoya un pie. Esto te ayudará a ganar fuerza en los grupos musculares implicados en las dominadas y cada vez estarás más cerca de hacerlas por ti solo.

-      Realízalas con un agarre algo más estrecho y poco a poco vete separando las manos, dependiendo de la posición de las manos complicarás más o menos el ejercicio.

-         Por último, realiza el jalón al pecho en tú rutina de espalda. Poco a poco vete incrementando el peso por el que jalas. Cuando ya levantes  el mismo peso o aproximado al que tú pesas y seas capaza se hacer unas cuantas repeticiones sin ayuda, seguro que podrás levantarte haciendo dominadas.

-       Cuando ya seas capaz de hacer unas cuantas dominadas por ti solo, ese es el momento en el que no debes de parar, sigue haciendo dominadas, además del día de espalda, algún que otro día más durante la semana y seguro que en poco tiempo vas a hacer más dominadas de las que jamás pensaste. 

     Como con cualquier tipo de entrenamiento en la vida, lo que te marca el éxito que vas a tener es la constancia a lo largo del periodo de entrenamiento, así que aunque odies las dominadas y no las quieras ver ni en pintura, entrénalas duro y ya verás que consigues resultados.